Roberto Bonfanti cultiva las parras que fueron implantadas en 1915 por su familia, al pie de la Cordillera en suelos poco profundos, que formaron parte de las márgenes del Río Mendoza. Trabaja la tierra, poda con esmero y cosecha las uvas que sus hijos trocan en vinos, el cielo los ve pasar de la hilera a la bodega, con las manos tintas, la sonrisa amplia y la pasión intacta.
Ciento por ciento Malbec. Esta edición posee el 50% de crianza en barricas de roble francés durante 12 meses, y guarda en cava subterránea a 15° C.
Nicolas –
Vi-na-so. Con todas las letras!